Remedio medieval podría ayudar a combatir las Superbacterias
El creciente problema de la resistencia de las bacterias a los antibióticos ha obligado a los científicos de todo el mundo a buscar nuevos tipos de antimicrobianos, ya que la capacidad de estos microorganismos de adaptarse a las medicinas existentes sugiere que en un futuro próximo no se podrán tratar con éxito muchas de las infecciones. No obstante, persiste un vacío de descubrimiento de antibióticos, por lo que un equipo de investigadores británicos decidió enfocar sus estudios en plantas y otros materiales naturales utilizados por nuestros antepasados para las infecciones.
Ya en 2015, estos científicos británicos reconstruyeron un medicamento de 1.000 años de antigüedad, conocido como el ‘colirio de Bald’ —que contenía cebolla, ajo, vino y sales biliares—, y demostraron que “tenía una actividad antibacteriana prometedora”. Tras varios años de investigación, el equipo publicó en la revista ‘Nature’ este 28 de julio un nuevo estudio, que encontró que el efecto bactericida de este antiguo remedio se extiende contra varios tipos de patógenos que tienden a formar biopelículas en heridas de tejidos blandos. Los autores del estudio definen este descubrimiento como crucial, ya que las infecciones asociadas a biopelículas —comunidades de bacterias que producen una matriz extracelular protectora y son especialmente persistentes a los antibióticos— representan un área particularmente problemática, que amenaza desde el éxito de cirugías de rutina hasta ciertos tratamientos contra el cáncer.
Además, el estudio encontró que la potente actividad anti-biopelícula del ‘colirio de Bald’ no puede atribuirse a un solo ingrediente, como por ejemplo el ajo, sino que requiere la combinación de todos los ingredientes del remedio antiguo. Por ello, los autores destacan “la necesidad de explorar no solo compuestos individuales, sino también mezclas de productos naturales para el tratamiento de infecciones de biopelículas”. En comentarios para ‘CNN’, una de los autores de la investigación, Freya Harrison, sostuvo que el ‘colirio de Bald’ “es particularmente prometedor para el tratamiento de las infecciones asociadas al pie diabético”, que “son la última infección de biopelícula súper resistente” y representan “una gran carga económica y para la salud”.
“Realmente pueden volverse intratables. Existe un alto riesgo de que estas úlceras del pie diabético sean completamente resistentes a cualquier tratamiento con antibióticos. Luego existe el riesgo de que una persona desarrolle sepsis (…) y se le termine amputando un pie o pierna”, advirtió Harrison, que es también microbióloga de la Facultad de Ciencias de la Vida de la Universidad de Warwick (Reino Unido). La fórmula del remedio fue encontrada por Harrison en la Biblioteca Británica, en uno de los primeros textos médicos conocidos en inglés antiguo: el ‘Bald’s Leechbook’.