A lo largo del día los seres humanos consumimos una determinada cantidad de agua en relación a nuestras actividades cotidianas. Beber la cantidad de agua adecuada para nuestro organismo permite que los niveles de acidez del cuerpo se mantengan estables, del mismo modo hace posible que los órganos funcionen correctamente, informa el portal ‘Record’.

El consumo de agua al día es beneficioso también en el sentido estético y es que permite que la piel, el cabello, e incluso las uñas se mantengan sanas y bellas. Consumir la cantidad adecuada de agua, en relación a cada individuo permite además reducir las enfermedades que afectan al colon. Los problemas cardiacos también se reducen si se consume al día el agua necesaria.

Beber agua en cantidad suficiente también mejora la resistencia de nuestro organismo para de ese modo no contraer enfermedades como la gripe o a influenza. La buena hidratación del cuerpo a través del consumo de agua reduce los riesgos de padecer enfermedades renales y también disminuye la aparición de infecciones del tracto urinario.

Así como es beneficioso consumir agua en cantidades necesarias, también es negativo el consumo excesivo de agua. Muchos especialistas recomiendan el consumo de al menos dos litros de agua al día, quienes siguen esta premisa, deben tener presente que el agua del que hablan estos expertos no solo se encuentra en la que se bebe directamente, sino también en los alimentos que se consumen.

De esa forma consumir dos litros de agua en su forma líquida sin tener en cuenta el líquido que tienen otros alimentos que se ingieren durante el día, como las frutas y verduras, puede hacer que se esté excediendo de la cantidad, aunque esto siempre depende de cada organismo. Incluso existen trastornos relacionados al excesivo consumo de agua al día. Entre las consecuencias del consumo excesivo de agua se hallan el insomnio, incluso la sudoración extrema y desequilibrios en las sales que posee el cuerpo.