Organismos marinos prehistóricos se comunicaban entre sí

Restos hallados en la isla de Terranova (Canadá) certificarían que ciertos organismos que existían en la Tierra hace más de 500 millones de años estaban conectados mediante redes que les resultaban imprescindibles para sobrevivir, según estiman unos científicos en un estudio publicado por la revista ‘Current Biology’.

Esos filamentos, que miden hasta cuatro metros de longitud y de 0,1 a 0,4 milímetros de ancho, rodean las huellas donde se encontraban diversos rangeomorfos, unos organismos semejantes a los helechos que vivían en el fondo de los mares de nuestro planeta durante el periodo Ediacárico.

Estos especialistas observaron 38 lechos de rocas y observaron que en algunos lugares había hasta 580 hilos por metro cuadrado, unos elementos flexibles que terminan en zonas donde esos organismos se fijaban al suelo y ambos elementos tendrían una conexión física entre sí. Las redes de filamentos podrían haber intervenido en procesos de alimentación, reproducción, comunicación y formación de colonías, así que el análisis de este fenómeno ayudaría a entender cómo interactuaron esas especies desaparecidas.