Tras el auge de los precios del oro físico debido a la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, la plata, el platino y el paladio siguen el mismo patrón y muestran la creciente desigualdad de precios al contado en relación con sus futuros, informa ‘Bloomberg’.

Así, el lunes la bolsa neoyorquina Comex registró un máximo en las entregas de plata para julio en casi 25 años. En cuanto al platino, las entregas para julio fueron cinco veces mayores que para el segundo mes más grande del año. Por su parte, la desigualdad entre los precios de futuros y metales al contado registrada en el segundo trimestre del año es la máxima en cerca de cuatro décadas para la plata, desde 2008 para el platino y desde 1993 para el paladio.

Como resultado de la reducción de la oferta de futuros y la sobresaturación de reservas, los intereses abiertos de los metales precioso han caído drásticamente. Así, en el caso del platino registraron un desplome de un 56 % a partir del nivel de enero, alcanzando el nivel mínimo en los últimos ocho años. Para la plata, se redujeron en cerca de un tercio desde febrero. Por su parte, el paladio registra un interés abierto mínimo en 16 años.

Según el vicepresidente de la refinadora Heraeus Metals New York, David Holmes, los bancos recurren a la adquisición de metales físicos para reducir su exposición a las perturbaciones de precios. “Si un banco está en posición corta, es difícil cerrar el arbitraje. Por lo tanto, en lugar de aumentar su posición a medida que el arbitraje se hacía más amplio, tuvieron que mantener su posición constante o incluso reducirla”, comentó.