La sonda espacial Solar Orbiter graba Venus a ocho mil kilómetros

La sonda espacial Solar Orbiter de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA) pasó el lunes a 7.995 kilómetros de la superficie de Venus. El fin de la maniobra fue aprovechar la gravitación del planeta para acelerar la nave y ajustar su trayectoria en dirección al Sol. La cámara del aparato grabó el acercamiento. En las imágenes se aprecia la parte nocturna de Venus como un semicírculo oscuro rodeado de la parte del planeta iluminada con luz solar, que aparece con forma de media luna.

 

 

“Idealmente, hubiéramos podido resolver algunas características en el lado nocturno del planeta, pero había demasiada señal desde el lado diurno. Solo una franja del lado diurno aparece en las imágenes, pero refleja suficiente luz solar para causar la media luna brillante y los rayos difractados que parecen provenir de la superficie”, cita un comunicado de la ‘NASA’ al astrofísico Phillip Hess. La Solar Orbiter, lanzada en febrero de 2019, pesa algo menos de dos toneladas y tiene una dimensión máxima de 3 metros, sin contar sus paneles solares. Sus diez instrumentos científicos a bordo buscan dar una respuesta a cómo surge y cómo se acelera el viento solar y cuál es el origen del campo magnético que determina los ciclos de actividad solar perceptibles en nuestro planeta, además de otras preguntas científicas. En junio pasado, sobrevivió a su primer encuentro cercano con el Sol al pasar a 77 millones de kilómetros de su superficie, la mitad de la distancia que separa al astro de nuestro planeta.

Asimismo, este martes, otra sonda espacial, la europeo-japonesa BepiColombo, se acercó a tan solo 552 kilómetros de Venus. Al igual que Solar Orbiter, utilizó el segundo planeta del sistema solar como un ‘trampolín’ para llegar al objetivo de su misión, Mercurio, al que sobrevoló por primera vez a inicios de octubre. La ESA publicó una fotografía del acercamiento tomada a 1.573 kilómetros del planeta. Está previsto que ‘BepiColombo’ llegue a Mercurio a finales de 2025 y que un año después los dos orbitadores que lleva a bordo empiecen a recopilar datos de ese planeta, que, según los especialistas de la agencia, “contiene pistas importantes sobre la formación y evolución de todo el sistema solar”, indicó RT.