Los EUA y China, ya están protagonizando una nueva carrera espacial, lo que plantea nuevos riegos para la seguridad y la paz internacionales. Pero la nueva competencia entre las potencias, ahora se disputa desde dos planos diferentes, la militarización del espacio y la futura privatización de los recursos espaciales. Ya que en los últimos años, se han desarrollado armas que podrían destruir infraestructura espacial, como los satélites.

Además, empresas privadas de ambos países se encuentran desarrollando proyectos multimillonarios, para explorar los recursos naturales de la Luna y asteroides, lo que también podría enfrentar en un futuro, los intereses de las potencias espaciales. Por lo que la vida tal y como la conocemos, ya no sería igual, si una guerra espacial destruyera por ejemplo los satélites de los que el mundo ahora depende, y tanto China como Rusia, han demostrado que son capaces de hacerlo. Advirtieron el año pasado, los comandantes de las Fuerzas Armadas de Canadá y los Estados Unidos.

“La destrucción de uno de sus propios satélites por parte de Rusia e 2021, fue una exhibición asombrosa. Estamos interpretando eso, como un mensaje y una demostración de capacidad. No quiero ser dramática.¿Cómo será la guerra en el espacio? Probablemente no la veremos a simple vista, pero definitivamente sentiremos las consecuencias desde el momento en que comience”.Teniente General Nina Armagno, Directora de la Fuerza Espacial de los Estados Unidos. Los ataques a los satélites pueden acabar con los sistemas GPS, los sistemas bancarios, las redes eléctricas, las comunicaciones de los socorristas, y el impacto en las operaciones militares.

También China está documentando y describiendo abiertamente sus demostraciones de energía en el espacio. La vida tal como la conocemos ya no será como la misma”. Michael Adamson, Comandante de la tercera división espacial de Canadá. Y recientemente, el gobierno de la Unión Americana, anunció la formación de la red de Comandos Espaciales, que incluye al Comando del Indo Pacífico, con sede en Hawai, cuyo alcance va desde la Antártida, hasta el Círculo Ártico.