Identifican una de las principales diferencias entre humanos y animales
Investigadores de la Universidad de la Ciudad de Nueva York (Estados Unidos) y de la Universidad de Estocolmo (Suecia) han descubierto que el ser humano posee más capacidad retentiva para reconocer y memorizar información secuencial y que eso nos permite hablar, razonar y hacer planes, informa Phys.org.
Este estudio demuestra que los ‘Homo sapiens’ “desarrollaron una capacidad superior para procesar información congruente” y eso “podría ayudar a comprender las diferencias entre un hombre y un animal”, indica Magnus Enquist, director del Centro para el Estudio de la Evolución Cultural del centro educativo sueco.
Esos especialistas han recopilado datos de 108 experimentos con especies de aves y mamíferos que certifican que tuvieron grandes dificultades para distinguir entre ciertas secuencias de estímulos.
Algunas pruebas consistían en “recordar el orden en que se encendieron láparas rojas y verdes” y “hasta esa simple distinción les resultó difícil”, explica Johan Lind, coautor del estudio y profesor adjunto en la Universidad de Estocolmo.
Esta experiencia aclara por qué resulta imposible enseñar un idioma a un animal, ya que no pueden distinguir el orden en frases como “el perro muerde a la señora” y “la señora muerde al perro”.
Según Stefano Ghirlanda, autor principal del estudio y profesor de Psicología en el Brooklyn College y la Universidad de la Ciudad de Nueva York, la memoria de los animales es “más simple”.
Reconocer secuencias de estímulos es una condición previa para que el ser humano desarrolle rasgos únicos como la lengua, las matemáticas o la capacidad para entender juegos estratégicos como el ajedrez.
Así, estos invetigadores estiman que, en algún momento de la prehistoria, la capacidad para reconocer y memorizar secuencias de estímulos evolucionó y permitió esos avances.