Europa tenía una Moneda común hace 3,500 años
Dos arqueólogos de los Países Bajos presumen de haber identificado el primer dinero mercancía de Europa, que se remonta a la Edad de Bronce. Hace aproximadamente 3.500 años, ciertos artículos hechos de ese metal, como torques, barras y hojas de hacha, podían tener en sí mismos un valor, más allá del que determinaba su uso habitual.
Segun el estudio de Maikel Kuijpers y Catalin Popa, publicado en la revista ‘PLOS One’ el 20 de enero, decenas de hallazgos arqueológicos previos a su investigación han incluido esos objetos metálicos. Gran parte de ellos eran considerados como tesoros, y en particular los tres artículos mencionados fueron casi omnipresentes en el continente europeo. Los rasgos imprescindibles para interpretarlos como un posible medio de pago son la forma similar y el peso estandarizado de cada artículo. Las mediciones realizadas por estos dos investigadores muestran que es cierto para un 70 % de los torques desenterrados.
Los anillos eran tan parecidos en masa (cerca de 195,5 gramos) que no se podría notar la diferencia si los hubieran sopesado a mano, y no hay indicios de que los europeos de la época supieran utilizar la balanza. Aunque las barras y las hojas de hacha no son tan uniformes, el estudio concluye que los muchos ejemplares hallados de estos dos artículos también son lo suficientemente semejantes como para demostrar, en su conjunto, “el desarrollo más temprano del dinero mercancía en la Europa Central prehistórica”. Los investigadores destacan que en un hallazgo hecho en Polonia, varias barras estaban atadas junto con una hoja de hacha.
“Es casi como los euros de hoy, que tienen diferentes imágenes pero por lo demás son equivalentes unos a otros”, sintetizó el profesor Kuijpers en un comentario para un comunicado de la ‘Universidad de Leiden’. En su opinión, incluso hay fundamentos para hablar de “los euros más tempranos”. Además de los estándares, tiene mucha importancia también el material, que es reutilizable y permite moldear y copiar fácilmente, en contraste con los objetos hechos de piedra, que todavía eran muy comunes en la Edad de Bronce.