‘El informe Chilcot’ sobre Irak: Saddam Hussein no representaba ninguna amenaza inminente
“Hemos llegado a la conclusión de que el Reino Unido decidió unirse a la invasión de Irak antes de que se agotaran las opciones pacíficas para el desarme. En aquel momento las acciones militares no eran la última opción”, ha declarado este miércoles en su discurso sir John Chilcot, el hombre que encabezó la investigación sobre la guerra en Irak.
Los puntos clave del informe son los siguientes:
– Tony Blair era consciente de que la invasión de Irak aumentaría la amenaza para el Reino Unido por parte de Al Qaeda
– La invasión de Irak por parte del Reino Unido fue un error y sus consecuencias se siguen notando
– Las acciones del Gobierno de Blair en Irak se basaron en datos de inteligencia erróneos
– Las sentencias sobre la gravedad de la amenaza que representaban las armas de destrucción masiva de Irak se presentaron con una certeza injustificada
– A pesar de las advertencias explícitas, las consecuencias de la invasión se subestimaron. La planificación y la preparación para un Irak después de Saddam Hussein fueron totalmente inadecuadas
– El Gobierno no logró alcanzar sus objetivos declarados.
“En 2003, por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial, el Reino Unido participó en la invasión y la ocupación a gran escala de un Estado soberano. Fue una decisión de la más extrema gravedad. No hay duda de que Saddam Hussein era un dictador brutal que atacó a la población de Irak, reprimió y mató a muchos de sus propios ciudadanos y violó las obligaciones impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU. Pero lo que la investigación se pregunta es si fue justo y necesario invadir Irak en marzo de 2003 y si el Reino Unido podría y debería haber estado mejor preparado para las consecuencias”, ha declarado también Chilcot.