Diseñan submarino para crear Icebergs

Revertir la desglaciación del Océano Ártico es la ambiciosa idea que se plantearon tres jóvenes arquitectos e ingenieros indonesios. Para ello, Faris Rajak Kotahatuhaha, Denny Budi y Fiera Alifa diseñaron una especie de submarino que desaliniza y convierte en hielo el agua marina.

El proyecto surgió en respuesta a un concurso convocado por la Asociación de Arquitectos Siameses (Tailandia), donde en mayo pasado se hizo con el segundo premio por su concepto amistoso con el medioambiente. Desde entonces, sigue ganando popularidad al tiempo que también cosecha críticas, publica este 12 de septiembre la revista ‘VICE’.

Esta ‘fábrica de hielo’ flotante y sumergible cuenta con un tanque hexagonal que toma el agua del mar y la trata por medio de ósmosis inversa, esto es, transfiriendo el líquido a través de una membrana para reducir su salinidad. Al separar la sal del agua, se facilita la creación del hielo al necesitarse menos frío para su congelamiento.

 

 

Según los cálculos de sus creadores, el submarino tarda un mes en moldear y liberar al océano un iceberg artificial hexagonal de 2.073 metros cúbicos y 24 metros de ancho.

Faris Rajak dijo a los medios que su equipo se inspiró en una investigación sobre el aumento del nivel del mar, un fenómeno “que está directamente relacionado con el cambio climático y hace que los icebergs se derritan”. Indonesia se ve entre los países más afectados por el creciente nivel del océano. En agosto pasado se alertó de que su capital, Yakarta, se hundirá en pocas décadas, dejando a millones de personas sin hogar.

La forma hexagonal de los témpanos de hielo fue elegida debido a que así estos pueden ser mutuamente compatibles y formar un panal. Este diseño tiene que ver también con la estructura de la molécula del agua, explicó el coautor.

Entre las críticas recibidas por el proyecto, la periodista Carly Cassella, de Science Alert, dijo que, contrariamente a la creencia generalizada, el derretimiento de los icebergs no contribuye al aumento del nivel del mar, ya que esas grandes masas de agua congelada ya se encontraban flotando en el océano con anterioridad. Un enfoque más productivo, a su juicio, sería congelar hielo en tierra firme.