Descubren nuevos cúmulos de Galaxias antes desapercibidos

Un equipo de astrónomos del ‘Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés)’ ha descubierto nuevos e inusuales vecindarios galácticos que habían sido pasados por alto en observaciones anteriores, según detalla un reciente estudio publicado en la revista ‘The Astrophysical Journal’.

Los resultados de la nueva investigación sugieren que hasta 1 % de los cúmulos de galaxias pueden ser identificados erróneamente como una única y brillante galaxia. Además, destaca que hay agrupaciones galácticas que pueden contener entre cientos y miles de galaxias unidas por la gravedad, sin que por décadas hayan sido consideradas como tales. Los especialistas explican que los cúmulos se mueven a través de un mar de gas caliente, llamado medio intracúmulo, y emiten radiaciones de rayos X que pueden verse con telescopios espaciales. Por lo general, esa radiación crea un “halo difuso” alrededor de los cúmulos de galaxias, lo que facilita su identificación y diferenciación con respecto a un objeto con una única fuente de rayos X, como una estrella o un cuásar.

Sin embargo, como lo determinó en 2012 un profesor del MIT, Michael McDonald, no todos los cúmulos cumplen con este principio general: descubrió el llamado cúmulo de Phoenix, en el que un agujero negro emite rayos X lo suficientemente brillantes como para opacar ese efecto. Por ello, parecía una única fuente de rayos X y así fue clasificada erróneamente durante mucho tiempo. “Estuvo en el archivo durante décadas y nadie lo vio. Lo pasaban por alto porque no se distinguía bien”, comentó McDonald.

Desde ese momento surgió un estudio denominado Clusters Hiding in Plain Sight (CHiPS), que durante los últimos años ha logrado identificar tres nuevos cúmulos de galaxias, uno de los cuales es similar al de Phoenix. Los investigadores esperan que los resultados de su nueva investigación ayuden a otros astrónomos, como los que trabajan con el telescopio de rayos X eROSITA, a comprender mejor cómo buscar cúmulos. Si se pierde el 1 % de ellos, “habrá un límite fundamental en cuanto a lo bien que se puede entender el universo”, remarcó McDonald.