Un equipo de arqueólogos rusos ha hallado los restos momificados de una antigua mujer-guerrera durante una excavación en la ciudad de Azov, ubicada en la región de Rostov, al sudoeste de Rusia, informan medios locales.

El descubrimiento se produjo en el lugar de enterramiento que data del siglo XIII d.C. situado en unas tierras cosacas habitadas en la antigüedad por distintas tribus nómadas.

En la cara de la mujer, los arqueólogos encontraron rastros de numerosas heridas, y los expertos no descartan que se trate de una representante de la tribu que dio pistas a mitos griegos sobre las amazonas, un pueblo conformado y gobernado íntegramente por mujeres guerreras.

Después de un cuidadoso estudio de la momia, los científicos no tienen ninguna duda de que todas las cicatrices y cicatrices en su cuerpo son consecuencia de heridas infligidas por espada, informa el portal local ‘Bloknot’.

Quizás gracias a sus habilidades de combate, la mujer logró vivir una vida tan larga, ya que la guerrera murió alrededor de medio siglo después de recibir estas heridas.

La cultura a la que pertenecía esta mujer guerrera existió en ese territorio hasta mediados del pasado milenio.