Científicos intentan decifrar El misterioso manuscrito Voynich

El manuscrito de Voynich es una obra medieval escrita en el siglo XV por autores desconocidos. Los investigadores tratan de resolver su enigma desde hace cientos de años, dado que el lenguaje del manuscrito es desconocido hasta la fecha. Algunos incluso sugieren que fue creado por extraterrestres. Recientemente, la editorial española Siloé decidió editar réplicas exactas del libro para ayudar a los científicos y aficionados que no pueden obtener acceso al original.

En 2013, el físico Marcelo Montemurro de la Universidad de Manchester publicó un documento que apoya la teoría de que el texto del manuscrito de Voynich no es un conjunto de caracteres inútiles, sino un tipo de mensaje oculto en un lenguaje olvidado. Para ello utilizó una de las técnicas diseñadas para estudiar la codificación de la información en el proceso de trabajo de neuronas: este método permite identificar los datos importantes en la señal, aunque no se sabía cómo interpretarlos.

En una entrevista con Lenta.ru Montemurro dijo que cuanto más estudiaba las características estadísticas del texto, más niveles de la estructura de la lengua desconocida encontraba. El investigador también rechazó la hipótesis de que la información que contiene el manuscrito es codificada, dado que los sistemas de cifrado fuertes tienen una característica importante: destruyen las características estadísticas de la lengua, para eliminar la posibilidad de conocer el contenido.

A Montemurro le llamó la atención el hecho de que el manuscrito de Voynich está sujeto a la ley de Zipf, que describe las estadísticas de la frecuencia de las palabras en las lenguas naturales. Además, el investigador señaló que el análisis del texto había revelado otro patrón: la repetición de ciertas palabras específicas coinciden con secciones del libro. Es decir, si las ilustraciones ubicadas en páginas específicas muestran una planta, entonces están acompañadas con un vocabulario asociado.

En 2014, el profesor brasileño de la Universidad de Sao Paulo, Diego Amancio, tras utilizar ‘Big Data’ o datos masivos (un conjunto de tecnologías y enfoques para el análisis automatizado de cantidades extremadamente grandes de datos) también recibió la confirmación de que el manuscrito de Voynich no es una falsificación. Los investigadores científicos han demostrado que la estructura de la lengua desconocida coincide con estructuras modernas.

Amancio no trató de traducir el texto, él solo unió las palabras en grupos y analizó las relaciones entre ellos, haciendo un modelo de una red integrada. Como resultado, se encontró que el 90% de la estructura del texto de las repeticiones de manuscritos se encuentran en la Biblia y otros libros bien conocidos.

En cuanto al contenido del manuscrito, aquí Amancio está de acuerdo con otros especialistas. Según él, el documento es una enciclopedia de prácticas medievales, que incluyen las prescripciones médicas, información astrológica y metafísica, así como ritos de fertilidad.