Científicos creen que colosal Estructura podría estar enterrada bajo Australia
Investigadores de la Universidad de Nueva Gales del Sur (Australia) sugieren en un artículo publicado en la revista Tectonophysics que el cráter de impacto de asteroide más grande del mundo podría estar enterrado en las profundidades del sureste de Australia.
Como explica el profesor Andrew Glikson en The Conversation, un cráter se forma a partir del choque de un asteroide contra la superficie terrestre. La cavidad resultante presenta una cúpula central elevada que, en palabras de Glikson, es característica de las estructuras de gran impacto. No obstante, observa que identificarlas no siempre es fácil, ya que suelen erosionarse con el paso de tiempo. A lo largo de la historia, tanto el continente australiano como su continente predecesor, conocido como ‘Gondwana’, han sufrido numerosos impactos de asteroides. Hasta el momento se ha documentado la existencia de 38 cráteres de impacto en Australia, así como de otros 43 potenciales candidatos de diversos tamaños.
En una reciente investigación, Glikson indica que la estructura de impacto más grande del planeta podría ser la de Deniliquin, situada en el sur de Nueva Gales del Sur, que mide aproximadamente 520 kilómetros de diámetro. Glikson especifica que el cráter de Deniliquin superaría en tamaño al de Vredefort (Sudáfrica), el mayor que se tiene identificado hasta la fecha, cuyo diámetro es de 300 kilómetros. La existencia de la estructura de Deniliquin fue propuesta por primera vez a finales de la década de 1990 por el científico Tony Yeates, quien se basó en los patrones magnéticos de debajo de la cuenca del río Murray, en Nueva Gales del Sur. Un análisis posterior, concluido en 2020, confirmó la existencia de una gran estructura de impacto debajo de esta región del sureste australiano.
Sin embargo, la mayor parte de la evidencia del cráter de Deniliquin proviene de datos geofísicos de la superficie, por lo que es necesario hacer perforaciones profundas para tener pruebas del impacto. Glikson estimó que el impacto del asteroide tuvo lugar hace 445 millones de años, alrededor del final del período ordovícico tardío. Se cree que el choque del cuerpo rocoso pudo haber desencadenado un importante evento denominado como ‘glaciación de Hirnantian’, que provocó la extinción del 85 % de las especies del planeta. Por último, el científico dice que se recolectarán muestras para determinar la edad exacta de la estructura, para lo cual se requerirá realizar una perforación en su centro magnético, reportó RT.