Agricultor afirma que al innovar podremos vivir en la Tierra para Siempre
El científico británico Stephen Hawking ha predicho, en sentido figurado, que la Madre Tierra se quedará ‘sin leche’ en 2117, y que debemos abandonar el planeta antes de esa fecha. Una predicción que no convence a todos. Por ejemplo, al expresidente de la Sociedad Hortícola Estadounidense George Ball, que cree que se trata de una afirmación retórica con poca base científica. Lo escribe en un artículo publicado en ‘Philadelphia Inquirer’.
“Debido a su fama [la de Hawking], el público percibirá su advertencia de forma muy literal. Como vendedor internacional de semillas, creo que él está equivocado”, expresa Ball.
La Tierra tiene capacidad para dar sustento a un máximo de 35.500 millones de personas con un consumo medio por habitante de 1.500 calorías diarias. “A este ritmo, la plena capacidad se alcanzará dentro de unos 105 años. Nuestra población sigue aumentando: plantamos más ranchos, más granjas y pescamos en todos los lugares en que podemos. Todo el mundo se alimenta”, precisa.
“Si concluimos que el pronóstico de Hawking es correcto, tendríamos que negar que los seres humanos son creativos, ingeniosos e innovadores. Podría estar equivocado”, afirmó Ball citando ejemplos de destacadas innovaciones de la historia humana.
Sin embargo, Ball tiene una opinión contraria. “Hace aproximadamente unos 10.000 años inventamos un alimento de alta ingeniería, el pan. En cuanto al ingrediente principal del pan, el cultivador y premio Nobel Norman Borlaug salvó 245 millones de vidas a través de la selección de una planta de trigo más corta y más productiva: solo una planta y una persona alimentaron a casi un cuarto de millar de personas. Si podemos llegar a la Luna, podemos desarrollar nuevos alimentos en gran abundancia”, supuso.
A juicio del expresidente de la Sociedad Hortícola Estadounidense, está universalmente aceptado que la desnutrición está causada por la pobreza, mientras que esta, a su vez, es producto de los conflictos sociales, la inestabilidad y las guerras. “Si no hay libertad, no hay libre mercado”, afirmó el especialista.
“Tales realidades prosaicas no se le pueden ocurrir a un talentoso físico teórico”, afirmó con ironía. “Acortamos nuestras vidas al matar, mutilar y matarnos por hambre los unos a los otros. Si dejamos de hacerlo, viviremos en la Tierra siempre”, concluyó Ball.