Las autoridades alemanas han dado luz verde para dar la licencia como complejo balneario a una megaconstrucción ideada por Adolf Hitler como paraíso vacacional para los nazis en la costa del mar Báltico. El diario ‘Ostsee Zeitung’ precisa que se prevé que el Gobierno entregue el permiso el próximo 17 de agosto.

Se trata del hotel Prora, cerca de la ciudad de Binz, en la isla alemana de Rugen. Una parte de esta enorme construcción ya ha sido renovada y reparada, pudiendo recibir a los primeros turistas el próximo mes.

El complejo comenzó a construirse en 1936, cuando Alemania aún trataba de levantar su sociedad tras la Primera Guerra Mundial. Pero para la desgracia de los 20.000 nazis que esperaban disfrutar ahí sus vacaciones de verano, el paradisíaco sueño de Hitler se paralizó en 1939 con el inicio de la Segunda Guerra Mundial, y se esfumó por completo con la caída del Reich.

El complejo hotelero permaneció abandonado y en condiciones de deterioro hasta el 2013, cuando la compañía alemana Metropole Marketing pagó 2,75 millones de euros (3,15 millones de dólares al día de hoy) por los derechos para renovar los 4,5 kilómetros de construcción a lo largo de la costa del mar Báltico.